Ya lo sé, me he vuelto a dormir en los laureles en la actualización del
blog, pero espero enmendarme con un saludable plato, apto para vegetarianos.
La receta está sacada del Cocina Conmigo de la NDS, como curiosidad aparece
en la sección de platos del Reino Unido, no tenía ni idea que la lasaña forme
parte de la típica comida anglosajona…
Sin más vamos con esta lasaña vegetariana
INGREDIENTES 4 – 6 personas (una fuente de horno)
1 berenjena
1 Calabacín
1 pimiento rojo
1 pimiento verde
1 cebolla
2 dientes de ajo
24 tomates cherry
9 placas de lasaña de espinacas (las verdes)
Albahaca (si es fresca mejor)
Sal, aceite de oliva, pimienta negra
Para la bechamel de parmesano:
1l de leche
2 cucharadas de harina
4 cucharadas de aceite de oliva
5 cucharadas de queso parmesano rallado
Sal, pimienta negra
Mantequilla
PREPARACIÓN
Lavamos y picamos de forma muy menuda, dados de aprox. 1 cm., la berenjena
y el calabacín.
Limpiamos y quitamos las pepitas a los pimientos, picamos también muy
finamente.
Pelamos y picamos menudo la cebolla y el ajo.
Lavamos y partimos por la mitad los tomates cherry.
En una sartén amplia con un poco de aceite, sofreímos primero el ajo. Cuando
comience a desprender olor, añadimos la berenjena, el calabacín y la cebolla.
Transcurridos un par de minutos le añadimos los pimientos, y dejamos sofreír hasta
que los ingredientes cojan color removiendo de vez en cuando.
Por último le agregamos los tomates, salpimentamos a gusto y añadimos
albahaca, si es fresca mejor, aunque yo lo preparé con seca.
La verdura debe quedar pochada, pero no tan blanda como si fuera pisto.
Como tarda un rato en hacerse y solo hay que vigilar la verdura y darle vueltas,
mientras se va cocinando, aprovechamos para preparar el resto de la lasaña.
Cuando esté preparada la verdura apagamos el fuego y reservamos.
Para hidratar las placas de lasaña seguimos las instrucciones del fabricante,
en mi caso usé placas precocidas de el Pavo, que no necesitan ponerlas a
hervir, tan sólo dejarlas en una fuente con agua caliente del grifo durante
unos 10 minutos. Después las dejo escurrir sobre un paño de cocina (limpio por
supuesto).
Como consejo, para calcular cuantas placas necesitas, es mejor
hidratar una primero, porque tienden a aumentar de tamaño, y colocarlas sobre
la fuente que usaras para la lasaña, luego solo hidratamos las que necesitemos
según las capas que lleve nuestra lasaña. En mi caso al llevar sólo dos capas,
con 9 placas tuve suficiente.
Preparamos la bechamel de queso parmesano. Primero rallamos el queso
parmesano y reservamos.
Se prepara como un bechamel cualquiera, es mejor poner la leche entera a
calentar en un cazo aparte porque así se tarda menos tiempo en espesarla.
Freímos la harina en el aceite o mantequilla, añadiéndola poco a poco para que
no nos quede una masa incomestible. Le añadimos la leche caliente y remover y
remover y remover… Es aburrido, cansado y pasas calor, pero está tan buena.
Cuando esté ya lo suficientemente espesa, salpimentamos a gusto y le echamos el
parmesano, removemos bien para que se funda el queso con la salsa y reservamos.
Precalentamos el horno a 180º. En una fuente alargada montamos la lasaña.
Primero engrasamos con mantequilla para que no se peguen las láminas de lasaña,
dividimos la verdura en dos y montamos lasaña+verdura+bechamel, terminando con
una placa de lasaña y bechamel abundante por encima.
Introducimos en el horno durante unos 25 minutos, dejando los últimos 5
minutos para gratinar.
Disfrutarla.
BRICONSEJO: En la receta original, sobre la última placa de lasaña le añade
mozarella cortada en dados, pero se me
olvidó comprar ese ingrediente, no es imprescindible, pero si se le añade
obtienes un punto cremoso extra que mejora el plato.