22 de marzo de 2012

CANELONES DE ESPINACAS


Las espinaca se encuentra entre mis verduras favoritas, por eso publico tantas recetas con ellas, en este caso unos canelones, que si bien son un autentico latazo de preparar, la recompensa de su sabor hace que el esfuerzo merezca la pena. Para los muy vagos o poco habilidosos, se pueden preparar esta receta como si fuera una lasaña. 

NOTA TONTA DEL DIA: La pasta para canelones que venden en los supermercados, la hay de dos tipos, normales y precocinadas.  Yo usé unas láminas precocinadas de Gallo  que sólo tienen que estar en agua caliente, pero el paquete sólo trae 12, por lo que tuve que coger unas láminas que tenía de lasaña, también precocinadas,  las corté una vez cocidas para que me cuadrara el tamaño… Monté un lío en la cocina, porque me di cuenta que me faltaban cuando estaba rellenando los canelones, eran ya casi las tres de la tarde y aún tenia la bechamel sin hacer, y las placas tardan un rato en hidratarse, al final me faltaban manos para todo.

He contado este rollo, para que las personas no muy experimentadas en cocina no se agobien, que al final sale todo, aunque a veces la cocina se desborde. Este blog es para que los que al igual que yo, han aprendido a cocinar gracias a recetas sacadas de internet  y le pierdan el miedo a los fogones, porque la cocina sólo requiere algo de paciencia, una mínima habilidad que se adquiere con la práctica y algo de sentido del gusto. 
Otro día cuento alguno de mis fracasos más sonados, que puede dar para una nueva etiqueta. 







INGREDIENTES

1 Paquete de láminas de pasta para canelones. Se necesitan unas 16.
1 bolsa de espinacas  frescas (400gr - 500gr). Pueden usarse congeladas, pero están más buenas frescas.
1 puñado de piñones
1 puñado de pasas
3 dientes de ajo
300 ml. De nata.
Queso parmesano rallado para gratinar. Por favor usar un queso de calidad, no esos polvos envasados, tu paladar lo agradecerá.
Aceite de oliva, nuez moscada, pimienta negra y sal.

Para la bechamel:
¾ l de leche, 1 cucharada de harina, 2 cucharadas de mantequilla, sal y nuez moscada.


PREPARACIÓN

Preparar el tipo de pasta que hayas elegido siguiendo las instrucciones del envase, la precocinada son 20 minutos en agua caliente, no hirviendo. La normal unos 12 minutos hirviendo. Cuando cumpla el tiempo reglamentario, dejar extendida sobre un paño para que absorba el exceso de humedad.

Cocer las espinacas en agua con sal, las frescas con 5 min hirviendo es suficiente.  Una vez cocidas escúrrelas bien.

En una sartén con poco aceite, sofríe el ajo cortado en láminas, las pasas y los piñones. Cuando el sofrito tome color agregar las espinacas, mézclalo todo bien y echa un poco de pimienta negra.

Rehoga unos minutos, y después vierte la nata, adereza con algo de nuez moscada y cocínalo hasta que espese. Es conveniente que remuevas de vez en cuando.

Cuando estén listas las espinacas, procedemos a rellenar los canelones, calcula un poco a ojo la cantidad suficiente para rellenarlos, y ayudándote de una cuchara vas depositando en el medio de la pasta las espinacas, y después cierras con cuidado el canelón y colocas en una fuente para horno. 

Preparas la bechamel, cubres con ella los canelones y espolvoreas al final con el queso rallado.

Metemos en el horno precalentado al máximo y gratinamos, cuándo el queso esté fundido y algo dorado, ya está listo para servir.
Disfrutarla.


BRICONSEJO: Usar nata normal, no nata para cocinar que es un timo de marketing, la nata para cocinar es la misma pero con más agua, por lo que tiene que estar más tiempo cociend  para tener el mismo resultado. Y NO engorda menos que la nata normal.

No hay comentarios:

Publicar un comentario